Tema 6: Herramientas para la madera

 Herramientas para la madera 

El conjunto de herramientas utilizado en carpintería es muy amplio, así que lo dividiremos en herramientas:

• de trazo
• de sujeción
• de corte
• de rebaje
• de perforación
• de percusión
• elementos de unión y de acabado.

 Herramientas de trazo 

El trazado consiste en marcar líneas o trazos para delimitar el contorno de las piezas, hacer de guía para el rebaje, e indicar los centros de los agujeros. Existen dos tipos de trazado: trazado en plano y en el aire. El primero es el que se realiza sobre una figura plana, y el segundo es el que se realiza simultáneamente sobre varias caras de una misma pieza.
El trazado también puede servir para señalar las caras que se desea que queden a la vista una vez terminado el trabajo o para marcar cada una de las piezas según cual sea el lugar que ocuparán dentro de la construcción. En las operaciones de trazado se utiliza el lápiz de carpintero, las puntas de trazado y el compás de trazado. También se utilizan elementos auxiliares de trazado para facilitar el trabajo: la regla de carpintero, el gramil y las escuadras.

La regla de carpintero es un prisma de acero de sección rectangular que se utiliza para trazar líneas sobre caras planas de piezas.

El lápiz de carpintero es un lápiz con minas de durezas HB, B o más blandas, que dejan una señal clara, pero sin hacer surcos en la madera.

Las puntas de trazado hacen el papel del lápiz. Son de acero y tienen los extremos de forma cónica, muy afilados, para rallar la madera.

El compás de trazado tiene las puntas de acero y sirve para trazar arcos, circunferencias y tomar mediadas. También es posible utilizar el compás tradicional.

El gramil es uno de los instrumentos básicos de un juego de herramientas de carpintero. Es una regla con una punta de trazar que se desplaza por el interior de un taco y que se fija con un tornillo. Sirve para trazar líneas paralelas en los cantos de las piezas.

Las escuadras son instrumentos que permiten trazar líneas paralelas y perpendiculares y para verificar superficies planas y ángulos rectos.
Para el trazado de ángulos de 45º se puede utilizar: la escuadra corredera, la escuadra de inglete o la falsa escuadra.

 Herramientas de sujeción 

Las herramientas de sujeción son dispositivos que permiten fijar con seguridad el material que se va a trabajar con las herramientas.

El tornillo de banco permite inmovilizar una pieza para trabajarla. Consta de dos mandíbulas, una fija y otra móvil, que pueden acercarse accionando un tornillo sin fin.

El sargento sirve para sujetar con fuerza las piezas a un banco, o bien unas a otras para encolarlas.
Existen sargentos especiales para unir piezas formando un ángulo recto.

La caja de ingletar es una guía para serrar listones en ángulos de 90º y 45º, gracias a los cortes ya practicados.
Para no marcar las piezas de madera podemos utilizar piezas mártires que evitarán el contacto directo entre la herramienta y la pieza a trabajar.

 Las herramientas de corte 

Son básicamente las sierras. Las sierras constan de una hoja de acero provista de dientes y un mango para sujetarla. Las características principales de una sierra son: la medida, la forma, el dentado y el grado de corte. La medida y la forma varían en función del trabajo destinado a la sierra.
Los dientes suelen tener formar triangular y únicamente cortan cuando se mueven en un sentido. El grado de corte es el número de dientes por unidad de longitud que tiene la hoja de la sierra. El dentado de la sierra puede ser ondulado o entresacado (inclinadas sucesivamente hacia un lado u otro)

El serrucho es la clásica herramienta que utilizan los carpinteros. Existen tres tipos básicos: el serrucho de hoja, la sierra de punta y la sierra de vaina.

La sierra de marquetería o segueta está constituida por un arco que sujeta una sierra muy fina. Se utiliza para cortar maderas de poco grosor y es ideal para realizar cortes siguiendo líneas curvas.
Antes de iniciar el serrado debe marcarse el camino de corte y fijar la pieza al banco para que no se mueva. Antes de comenzar a serrar se debe realizar una muesca para facilitar la penetración de la sierra.
Una pieza de madera debe ser aserrada siempre con precaución en la parte que va a quedar a la vista, pues los dientes de la sierra tienden a arrancar las fibras.
La sierra de marquetería debe tener la hoja con los dientes hacia fuera y hacia el asa. Se inicia el aserrado con la sierra perpendicular a la madera y el mango por debajo. En el movimiento de vaivén se avanza en la serrada cuando bajamos. Debemos evitar que la hoja se caliente, pues de lo contrario se rompería.

 Las herramientas de rebaje 

Son aquellas que permiten eliminar pequeños trozos de madera de la superficie, ya sea por tallado, alisado o limado.

La operación de tallado consiste en la realización de rebajes, ranuras, canales, encajes, etc. Efectuados mediante herramientas compuestas de un mango, y de una barra metálica acabada en un filo cortante. Las más habituales son: el formón, el escoplo, y la gubia.

Para alisar se utiliza el cepillo. El cepillo es una herramienta de base lisa y plana en la que asoma el filo de una cuchilla metálica.

El limado consiste en desgastar las piezas y acabar las superficies mediante una herramienta denominada lima. Una lima es una barra de acero con la superficie estriada con numerosos dientes. En carpintería se utilizan limas de dientes gruesos denominados escofinas.
Para pulir las superficies de las piezas y darles buenos acabados o prepararlas para operaciones posteriores (barnizado, pintado) se frotan con papel de lija. El papel de lija está formado por un papel en el que en una de las caras lleva adherido materiales abrasivos como granos de vidrio, esmeril, carburo de silicio, corindón, etc.

 Las herramientas de perforación 

Realizan dos movimientos: el movimiento de corte, mientras la herramienta va girando, y el
movimiento de avance, mientras la herramienta va penetrando gradualmente en el material.
Las herramientas que se utilizan para perforar la madera son: la barrena, el berbiquí, y las brocas.

La barrena es una herramienta constituida por un eje acabado en punta con una espiral de hojas cortantes, acoplada a un mango transversal. Se utiliza para perforar y para facilitar la entrada de los tornillos evitando que la madera se agriete.

El berbiquí está compuesto de una manivela giratoria con un pomo en un extremo y un portabrocas en el otro.

La broca es un cilindro de acero acabado en una punta cortante con dos ranuras laterales en forma de espiral diametralmente opuestas.
Existen diferentes tipos de brocas, según su uso y aplicación. Las brocas para madera tienen tres puntas en su extremo activo.

 Herramientas de percusión 

Son los martillos y las mazas, y se utilizan para golpear otras herramientas o introducir elementos de unión en la madera.

El martillo es una herramienta formada por dos piezas: la cabeza y el mango. El extremo cónico del mango se introduce en el orificio de la cabeza y se fija colocando una cuña en el extremo de salida, para evitar que la cabeza se salga del mango mientras trabajamos.
Los diferentes tipos de martillos son: el martillo de carpintero, el martillo de bola, y el martillo de orejas.

Las mazas son martillos de madera que se utilizan para golpear otras herramientas y así no estropearlas.

 Elementos de unión 

Los elementos que sirven para unir las piezas de madera son: los clavos y los tornillos.

Los tornillos son unas piezas metálicas cónicas y roscadas acabadas en punta de diferentes diámetros y longitudes, en las que se distinguen dos partes: la punta roscada y la cabeza. La cabeza puede tener diferentes formas y posee una ranura para acoplar el destornillador, que es la herramienta que permite introducir el tornillo en la madera.

Los clavos se introducen en la madera utilizando el martillo y se extraen mediante el martillo de orejas o las tenazas. Los clavos
constan de un cuerpo metálico, cilíndrico y alargado acabado en una punta, y de una cabeza plana. Los clavos pueden clasificarse
según su longitud y según la cabeza. Algunos de ellos carecen de cabeza ya que una vez introducidos en la madera desaparecen de su
superficie.

Las piezas de madera también se pueden unir mediante encajes. Existen dos sistemas: mediante clavijas y mediante entalladura.
Las clavijas son piezas de madera, generalmente de forma cilíndrica con la superficie lateral estriada, que se encolan y se introducen a presión en los agujeros realizados previamente en las piezas que se han de unir.
Encajes de entalladura. Para realizar encajes, primero debemos preparar las zonas de contacto de forma que las piezas ajusten perfectamente. A continuación, se encolan las superficies de contacto, se unen las piezas, y se mantienen presionadas mediante sargentos.