Historia de la vivienda
Nuestros antepasados más remotos tenían diversas necesidades básicas: protegerse de los peligros del entorno, defenderse del frío, construir un lugar donde poder almacenar los alimentos y las herramientas... Resolvieron todos estos problemas cuando dispusieron de lugares donde refugiarse. Al principio estos espacios eran cuevas, pero posteriormente construyeron las primeras casas.
La historia de las construcciones humanas empieza cuando los seres humanos se hicieron sedentarios. Los primeros poblados aparecieron entre el año 8000 a.C. y el 6000 a.C. en Çatal Hüyük en Anatolia (Turquía) y en Jericó (Palestina). Las casas de Jericó eran semicirculares y en ocasiones tenían dos pisos, mientras que las de Çatal Hüyük se construían adosadas unas a otras y la entrada se encontraba en la azotea, por lo que no habían calles.
Con las primeras magnas civilizaciones, aparecieron también las grandes construcciones como los zigurats sumerios, las pirámides egipcias, la gran muralla china, los templos y palacios griegos, etc.
El urbanismo fue una aportación de la civilización romana con la construcción de ciudades de forma planificada fijando las dimensiones y estableciendo los servicios necesarios.
Entre los siglos X y XIII encontramos, en buena parte de Europa, el estilo arquitectónico románico, severo y funcional, tendente a construcciones de piedra sin muchas ornamentaciones.
Posteriormente se utilizó el arco ojival que permitió construcciones espectaculares y monumentales tales como catedrales, palacios, universidades, monasterios, etc. Que definen el estilo arquitectónico del gótico.
Durante los siglos XV y XVIII se desarrolla el Renacimiento, un estilo arquitectónico marcado por la simplicidad, la geometría y el estudio inspirado libremente en los conocimientos de Grecia y Roma.
La simplicidad inicial dará paso a una arquitectura mucho más expresiva y teatral, con una profusa decoración y abundantes juegos formales y escultóricos, que denominamos barroco.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX la arquitectura dejó de preocuparse únicamente del diseño de edificios para gente adinerada y paso a tener un sentido más social.
Diseño de la vivienda
El diseño de una vivienda ha de ir precedido de un estudio de las necesidades y los hábitos de los futuros ocupantes en relación con sus actividades diarias. Estos aspectos pueden ser los siguientes:
- tipo de vivienda (piso, casa, torre, etc.)
- servicios próximos (comercios, hospitales, escuelas, etc.)
- emplazamiento de la vivienda (céntrico, en las afueras, en el campo, etc.)
- proximidad al lugar de trabajo
- relación con la naturaleza o el mar
- espacio disponible para cada miembro de la familia
- la tranquilidad, las vistas y nivel de ruido
- la orientación con relación al sol
El sol es una fuente natural de calor y luz. Tener luz natural en todas las habitaciones de la vivienda proporciona una sensación de bienestar. Por ello es importante que esté convenientemente orientada, pero también lo es para aprovechar al máximo la energía solar. Hay que tener en cuenta que en nuestra latitud, el norte recibe poca insolación y el sur mucha. El este recibe insolación de la mañana al mediodía y el oeste del mediodía a la tarde.
Distribución de la vivienda. Para poder satisfacer todas las necesidades, las viviendas se distribuyen en habitaciones. Según su función las podemos agrupar en cuatro zonas principales: zona de trabajo y servicios, zona para dormir y aislamiento, zona para vivir y estar y zona de acceso y circulación. Una vivienda puede ser satisfactoria si se distribuyen correctamente los diferentes espacios y se relacionan entre si con acierto.
Las cocinas suelen colocarse cerca de los comedores, los comedores comunican con la sala de estar, y los cuartos de baño a menudo se sitúan cerca de los dormitorios. La circulación por la vivienda depende de las relaciones entre los ambientes, del diseño individual de cada habitación, de la situación de las puertas, del lado al que se abren, del pomo para abrirlas y de la distribución de los muebles. El mobiliario se ha de distribuir siguiendo algunos criterios, como son: que estén próximos al lugar donde se realiza la actividad con la que están relacionados y que no molesten en los recorridos que hacemos normalmente al utilizar la dependencia.
Diseño de la vivienda
Representación gráfica
Un edificio puede representarse mediante planos donde se representan las vistas de alzado, planta y perfil. La vista de alzado muestra la fachada principal de la casa, mientras que la vista de perfil muestra las fachadas o partes laterales de la casa.
Los planos de secciones verticales muestran las dimensiones de altura y las características de elementos verticales como las escaleras para acceder de una planta a otra.
La vista de planta nos muestra el edificio desde lo alto y genera los siguientes planos: plano de cimientos, plano de distribución, plano de cubierta, plano de instalaciones y plano de cotas.
El plano de cimientos muestra la situación de los elementos de soporte del edificio y de las conexiones de agua, gas, electricidad, teléfono, etc.
El plano de distribución representa los espacios internos y la situación de puertas, ventanas, mobiliario, sanitarios, etc.
El plano de cubierta muestra los terrados y tejados, determina las pendientes, los elementos constructivos (chimeneas, pararrayos, etc.) y los materiales.
En el plano de instalaciones podemos apreciar las diversas instalaciones de la vivienda: electricidad, salubridad, lampistería, aparatos sanitarios, protección, calefacción, gas, comunicaciones,
aparatos elevadores, etc.
El plano de cotas muestra las diferentes plantas donde se representan, acotados, todos los espacios compartimentados, las paredes, los tabiques, los elementos constructivos, las superficies construidas, la rotulación de los diferentes espacios, etc. De cada cámara se indica la superficie (S) en metros cuadrados, el volumen (V) en metros cúbicos y la iluminación (I) en metros cuadrados.
Los planos de situación muestran las calles que rodean la construcción y los datos que permiten localizarla.
En ocasiones se utilizan otro tipo de planos para complementar la parte gráfica de un proyecto de construcción: son los planos de detalles constructivos, cuya finalidad es mostrar detalles concretos y específicos de algún elemento constructivo.
Planos vivienda
Para confeccionar los planos de construcción se utiliza un conjunto de símbolos normalizados para representar los diferentes elementos que en la realidad integran la obra (paredes, puertas, ventanas, mobiliario, elementos de cocina, sanitarios, etc.)
Símbolos de elementos constructivos en la representación en planta son: las paredes, las puertas, las ventanas, las columnas y los pilares, y los agujeros de ventilación.
Símbolos del mobiliario: los muebles principales de un comedor, de una sala de estar y de los dormitorios son la mesa, las sillas, el sofá, el bufet, los armarios, las mesitas, el tocador, etc. También tenemos los símbolos de los elementos de cocina y sanitarios.
Otros símbolos utilizados son los símbolos eléctricos y los símbolos de los elementos hidráulicos, además de los de instalaciones complementarias como jardinería, telefonía, calefacción y climatización, etc.
La realización de estos tipos de planos se hace también utilizando programas CAD que disponen de librerías con todos los símbolos normalizados. Estos programas permiten ver los objetos dibujados en tres dimensiones y hacerlos girar. También hay programas de diseño en tres dimensiones con los cuales pueden hacerse representaciones muy atractivas, pero los elementos no suelen estar normalizados por lo que se utilizan sobre todo en publicidad.
Los planos son la representación a escala de todas las partes que integran una obra arquitectónica o edificio. La escala es la relación constante entre las medidas del dibujo y las que tiene en la realidad el objeto. En los planos de construcción se acostumbra a utilizar la escala de reducción, es decir, que el dibujo que realizamos es de dimensiones más pequeñas que el objeto real. Las escalas de reducción normalizadas son: 1:2,5; 1:5; 1:10; 1:20; 1:50; 1:100; 1:200; 1:500; 1:1000.
Símbolos vivienda normalizados
Gestiones
Para construir una vivienda es necesario disponer de suelo donde ubicarla y de técnicos que realicen el proyecto y la construcción. Pero también son necesarios el dinero, un promotor y los permisos de la administración pública.
La promoción de la vivienda puede ser privada o pública. Es privada cuando el promotor es una persona particular o una empresa constructora o inmobiliaria, y pública cuando el promotor es la Administración (Ayuntamiento, Diputación, Generalitat, etc.)
Una vez que el promotor decide la construcción de la vivienda, encarga el proyecto a un arquitecto o equipo de arquitectos. El proyecto debe ser revisado por los técnicos municipales, que otorgan
la licencia de obras si comprueban que respeta las ordenanzas y las normas de seguridad y confort.
Durante la construcción de la obra, y también una vez acabada, los técnicos del Ayuntamiento inspeccionan la vivienda para comprobar que se ha construido según el proyecto, y si es así, conceden al promotor la licencia de uso y ocupación correspondiente.
Los técnicos de la Generalitat también inspeccionan la vivienda para comprobar que cumple las normas de seguridad y confort aplicables y, si es así, conceden al promotor la cédula de habitabilidad. Ésta es imprescindible para contratar los servicios básicos –agua, gas, electricidad y teléfono- con las compañías suministradoras.
Adquisición de una vivienda. Cuando necesitamos una vivienda, tenemos diversas opciones: convertirnos en promotores y contratar la construcción, comprar una vivienda o bien alquilarla. En los dos primeros casos nos hace falta una cantidad importante de dinero. La obtención del dinero necesario para construir una vivienda se denomina financiamiento y se suele realizar mediante una entidad bancaria. El dinero deberemos devolverlo mensualmente y el banco nos cobrará un interés. Además se pide una garantía, es decir, un bien con el cual pueda recuperar el dinero si no pagamos. En estos casos, la garantía es la misma vivienda. Si no pagamos, la entidad bancaria se queda con la propiedad. Este tipo de préstamos se conocen como hipotecas.
Otra opción para acceder a una vivienda es el alquiler. En este caso, el propietario de la vivienda nos lo cede para que podamos hacer uso durante un tiempo determinado a cambio del pago de una cantidad de dinero convenida.
Dado que el acceso a la vivienda es un derecho constitucional, la Administración facilita la compra o el alquiler a las personas o familias con ingresos bajos. La declaración de Vivienda de Protección Oficial y de Vivienda Protegida permite a las personas con rentas que no exceden de un importe determinado solicitar ayudas económicas para acceder a la vivienda.
Elementos constructivos
En una vivienda podemos encontrar elementos muy diferentes y cada uno de los cuales realiza funciones diversas. Todos los elementos que forman parte de la construcción de las viviendas se denominan elementos constructivos y, si los agrupamos por la función que realizan, los podemos clasificar en los siguientes grupos: cimientos, estructura, cubiertas, cierres, instalaciones, revestimientos, y acabados. Estos elementos coinciden aproximadamente con las fases de construcción de la vivienda.
Para que las edificaciones se mantengan sólidas, estables y seguras, es necesario contrarrestar la acción de diversas fuerzas: peso de los materiales de construcción, de los muebles, de las personas, la fuerza lateral del viento, movimientos sísmicos, etc.
Los cimientos son los elementos constructivos destinados a transmitir al terreno las fuerzas de la edificación para que sean contrarrestadas; generalmente, se hacen soterrados y sobre ellos
se apoya la estructura del edificio.
La primera acción que se realiza en el proceso de cimentación, es el análisis del suelo, denominada análisis geotécnica, cuya finalidad es encontrar la capa de suelo con mayor resistencia. Para ello se utiliza un penetrómetro, máquina que perfora el terreno y que permite obtener muestras de la composición de las diferentes capas.
Una vez analizado se prepara el terreno mediante los movimientos de tierras; éstos son: el desbroce, la nivelación y la excavación. También serían necesarias tareas de derribo si la vivienda se construye donde ya existía otra. El replanteo de los cimientos es una operación que consiste en reproducir sobre el terreno, previamente preparado, el plano de cimientos.
No todos los suelos son igual de resistentes, algunos están formados por rocas, otros por arcilla o por tierra, etc. Según la resistencia del suelo, la altura del edificio, y las cargas y esfuerzos que habrá de soportar, se utilizarán un tipo de cimientos u otro.
Tipos de cimientos: uno de los cimientos más utilizados es el que se realiza mediante la excavación de zanjas en el terreno, las cuales se llenan de hormigón, que en ocasiones es armado. Otro sistema es el de zapatas aisladas, en las que descansan los pilares, o zapatas continuas para las paredes maestras. Cuando el terreno es poco resistente se utilizan las losas o los pilones. Los pilones son barras de madera resistente, acero u hormigón armado que penetran en el terreno deficiente hasta fijarse en el terreno consistente.
Cimientos
La estructura está destinada a soportar todos los esfuerzos del edificio y transmitirlo a los cimientos para que sean compensados. Forman parte de la estructura los elementos de disposición vertical,
como los pilares, las columnas y las paredes maestras o de carga, y otras de disposición horizontal, como las vigas maestras, las vigas y los forjados, que son los elementos que forman los techos.
Para dividir en pisos un edificio es necesario realizar un envigado, que consiste en colocar un conjunto de vigas sobre las paredes maestras u otros elementos de soporte que componen la estructura del edificio. Las vigas dejan entre ellas unos vacíos que se rellenan con diferentes materiales lo que constituye el forjado.
El techo es la construcción que cubre y limita la parte superior de una vivienda. Está situado por debajo del forjado. La altura del techo debe ser como mínimo de 2,5 metros. Habitualmente se suele cubrir con yeso negro la parte inferior del forjado y posteriormente con yeso blanco.
A veces por debajo del techo se construye otro que se denomina falso techo. Suele realizarse en cocinas, lavabos y pasillos, donde la altura mínima legal es de 2,10 m. El falso techo permite aislar térmica y acústicamente la habitación, así como esconder conducciones de agua y luz.
Existen diferentes técnicas para construir las estructuras de las viviendas. Para los edificios altos se utiliza la estructura metálica porque es ligera y elástica, aunque en caso de incendio tiene el inconveniente de no ser tan resistente como el hormigón o la cerámica.
Si el edificio no es muy alto, se puede utilizar la estructura de hormigón armado a base de pilares y forjados.
En el caso de viviendas de pocas plantas, la solución más sencilla es el uso de paredes de carga (paredes maestras). Aún y así pueden utilizarse técnicas mixtas que combinan las partes metálicas con el hormigón armado y las paredes maestras.
La cubierta de una vivienda es la parte superior que cubre y protege la obra de los fenómenos atmosféricos. Debe ser construida con materiales totalmente impermeables, resistentes y, de poco peso.
Las cubiertas planas, denominadas también terrados, son las superficies exteriores que cubren un edificio y tienen una inclinación inferior al 5%. Acostumbran a realizarse con un forjado de obra.
Los tejados están formados por una o más superficies inclinadas.
Cierres. Una puerta es una obertura realizada en una pared desde el suelo hasta una altura adecuada que permite el paso de una cámara a otra en una vivienda (60 cm como mínimo) o el acceso a la misma desde el exterior (80 cm. como mínimo).
Una ventana es una obertura realizada en una pared, situada a cierta altura del suelo que sirve para que pueda ventilarse la habitación, que entre luz y calor y poder mirar al exterior. Según la normativa vigente las ventanas deben tener una superficie mínima que depende de la superficie de la cámara a la que pertenecen.
Revestimientos. El suelo de una vivienda es la superficie sobre la que se camina y que sirve de soporte a los diferentes complementos de la vivienda. Se cubre con un pavimento, que es un revestimiento que hace que el suelo sea más consistente, resistente, limpio y liso.
Complementos. La escalera es un sistema utilizado para comunicar pisos situados a diferente altura. O siempre que el desnivel entre dos planos sea superior a 15º. Las escaleras están formadas por unas piezas planas denominadas escalones. El espacio interior limitado por paredes en el que se construye la escalera se denomina caja de la escalera. La gualdera de contén es la parte resistente construida con una inclinación sobre la que se apoyan los escalones.
La escapada es la distancia que hay entre un escalón y la parte superior de la escalera o techo. Para que una escalera se considere cómoda para subir por cada metro de desnivel deben haber seis escalones. El tramo de una escalera es el conjunto de escalones seguidos comprendidos entre dos planos consecutivos denominados rellanos.
La escalera
El balcón es una abertura de la altura de una puerta hecha en la fachada de un edificio que permite acceder a un saliente.
El mirador, por su parte, es un balcón cubierto por la parte superior y cerrado por paredes de obra, con ventanas, o de vidrio.
La marquesina es un saliente con forma de cubierta plana o inclinada que se coloca generalmente sobre la puerta principal o a lo largo de toda la fachada de un edificio. Tiene como finalidad proteger de la lluvia o de otros fenómenos climatológicos a las personas que entran o salen del edificio.
Las barreras arquitectónicas son todas aquellas construcciones o estructuras que impiden la movilidad o acceso a personas con algún tipo de discapacidad. Actualmente existen normas que establecen las medidas y características de las nuevas construcciones, tanto de edificios públicos como particulares, para suprimir dichas barreras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario